Dejalo ir.

Siempre intenté justificar la falta de amor que me dabas. Siempre fuí la idiota que te perdonó, creyendo que un día ibas a cambiar. Siempre fuí yo quien le puso la cara buena al mal momento. Siempre te esperé con una sonrisa. Siempre me banqué tus inmadureces, o malas decisiones. Siempre fuí dulce, y te fuí con la verdad. Siempre te ayudé. Siempre te cuidé... Siempre te quise. A todo esto no entiendo, trato pero no puedo, entender por qué tantas excusas. Gracias por fingir al menos que un día te importé, por lo menos era felíz, o al menos eso sentí. El día que te toque sufrir ojalá te acuerdes de mí. No te guardo rencor, solo quiero volver a ser esa chica que te presenté. Para conocer alguien mejor, que sepa curar las heridas que me dejaste vos. Lo más triste que oí, fué que ibas.. Peor aún, con otra. Pero fué bueno comprender, que fuiste para mí, tan solo una piedra en mi camino.